La práctica de sexo oral es algo que por lo general gusta tanto a hombres como a mujeres, sobre todo si se trata de recibirlo. A la hora de darlo pueden existir casos a los que no le resulte tan gratificante.  Las estadísticas en España demuestran que no es una práctica tan popular como podríamos pensar. Alrededor de 4 de cada 10 españoles no ha disfrutado nunca de sexo oral. El miedo al rechazo, a no saber realizarlo o las dudas sobre el grado de higiene íntima de nuestra pareja hacen que muchas personas eviten disfrutar de ese placer.

Todos sabemos lo que nos gusta pero es más complicado acertar en lo  que nuestra pareja prefiere. En estos casos y según estudios realizados, la satisfacción recibida es siempre mayor entre las parejas estables puesto que cada uno conoce mejor los gustos del otro.

En cuanto a los errores que se cometen a la hora de proporcionarlo, varían un poco dependiendo del sexo, pero podemos darte unas pautas generales para orientarte sobre los gustos de cada uno:

  • Tiempo: a las mujeres les gusta recibir previamente masajes, besos y caricias antes de llegar al sexo oral. Ir antes de tiempo a este momento hace que lo reciban más fríamente y con menos excitación. Los hombres, sin embargo, no le ponen pegas al momento de recibirlo, pero queda claro que cuanto antes se realice más tiempo llevará hacerle llegar al clímax.
  • Delicadeza: hay que tratar la zona con delicadeza y según muchas mujeres los hombres lo hacen más bruscamente. Los hombres también necesitan algo de estimulación previa y mucha delicadeza si no se quiere acabar antes de tiempo
  • Silencio: Las mujeres, por lo general, suelen disfrutar de este momento en silencio. Hablar les quita concentración. Con gestos y miradas les basta para transmitir su placer a la pareja. Los hombres en cambio, pueden expresarse en ese momento puesto que su excitación no requiere de la misma concentración que el sexo contrario.
  • Ritmo: Es recomendable variar el ritmo y la intensidad para sorprender al otro con sensaciones inesperadas, pero nunca parar en seco cuando el que lo recibe llega al punto de no retorno, tanto en hombres como en mujeres.
  • Usar los labios: Las mujeres suelen utilizar más los labios y los hombres más la lengua. Para ambos, combinar los dos, produce distintas sensaciones que olvidamos utilizar en muchas ocasiones.
  • Expresar lo que nos gusta y no nos gusta en cada momento hace que nuestra pareja pueda aprender a proporcionarnos más placer en la siguiente ocasión.

Si entiendes y practicas estas sencillas normas, el sexo oral se convierte en una fantástica y gratificante experiencia para enriquecer nuestras relaciones. Tanto si lo utilizas como estimulante como si es el fin de la experiencia sexual, practícalo sin tabúes y recuerda, ¡Ponte ON!