El sentido de la vista ejerce un papel muy importante en las relaciones sexuales y es el más importante del cortejo en el ser humano.  De ese sentido aparece una de las preguntas más frecuentes a la hora de practicar las relaciones sexuales  ¿Luz encendida o luz apagada? La ausencia de luz deja a otros sentidos actuar de manera más fuerte, tenemos el sentido del tacto, gusto, oído y olfato. Aunque bien podemos afirmar que el juego de la seducción se puede llevar a cabo de ambas maneras. Cada pareja deberá elegir con cual se siente más cómodo o con cual se excita más.

A veces, la necesidad de realizar el encuentro sexual en la oscuridad puede ser síntoma de inseguridad, problemas de autoestima en la relación, no sentirnos cómodos con nuestros cuerpos o pudores ante la desnudez propia o del otro, situación que de manera frecuente puede suceder. A menudo ocurre al inicio de una relación, en los primeros encuentros de la pareja donde aún no se ha desarrollado la complicidad entre ambos y tampoco se han llevado a cabo todas las artes amatorias. Al fin y al cabo, la experiencia nos da la confianza y nos va permitir tener el control de la situación. Aunque, como antes mencionamos no tiene porqué ser necesariamente un problema. Hay parejas y personas que disfrutan mucho construyendo fantasías sexuales, las cuales son muy excitantes y eróticas y requieren de un ambiente con poca luz.

Pero ¿qué dicen las estadísticas? un estudio revela en relación a si preferimos hacer el amor con la luz apagada o encendida,  que el 26 por ciento apuesta porque no haya luz, un 19 por ciento busca tener la luz encendida ó luz natural, y a un 55 por ciento le da igual.

Ventajas e inconvenientes de cada  situación.

LUZ ENCENDIDA

  1. Con la luz encendida puedes observar todo lo que tu pareja está haciendo; mimos, caricias, susurros, etc., disfrutas y te excitas con lo que vas viendo.
  2. A quién le guste utilizar artículos eróticos, lencería, corsetería u otra ropa. Es perfecta la luz encendida, ya que si la luz está apagada, quién lo lleva no puede lucirlo y la otra persona no puede disfrutar de la belleza.
  3. Otra opción es aumentar la luz y el riesgo, podéis abrir las cortinas y la chispa por el miedo a ser pillados os pondrá más a tono.
  4. Para conocer a fondo a tu pareja y realizar nuevas prácticas es conveniente utilizar más luz para saber en qué zonas le gusta más o menos o con qué siente más placer.
  5. En general, te dejas envolver por el ambiente y por todo lo que ves.

SIN LUZ

  1. Para aquellas personas más vergonzosas y pudorosas resulta más práctico y sencillo. La mente estimula el placer y el resto de sentidos refuerzan la falta de éste.
  2. Más fácil para la gente que tenga algún complejo.
  3. Es una situación que para muchos resulta muy morbosa, notas todo lo que te están haciendo, pero no lo puedes ver. Sabes qué es lo que está haciendo ahora, pero no lo que llegará después.

Lo que debemos entender es que se debe dar rienda suelta a las fantasías sexuales de cada pareja, ya que habitualmente cada nueva experiencia, si ambos están conformes, será enriquecedora y todavía los unirá más.