Según una encuesta de un centro de investigación social, compartir las tareas del hogar se encuentra en el tercer puesto de los condicionantes para ser una pareja exitosa, tan solo precedido por la fidelidad y el sexo. Cocinar puede resultar una de las facetas más divertidas de las tediosas tareas de casa.
Ahora que el tiempo no acompaña para otras actividades, ¿por qué no dedicar un rato con tu pareja a preparar algo en la cocina? Según los expertos se trata de una actividad que mejora la comunicación y el conocimiento de tu compañer@ de una manera lúdica y a su vez productiva. Durante la elaboración de un plato, se propician situaciones que no se dan en la vida diaria y que de otro modo no podrías llegar a conocer con la misma facilidad.
Rompe con la rutina diaria puesto que es una actividad que la vida laboral no deja margen de tiempo para realizar a menudo. Cualquier novedad por pequeña que sea supone un aliciente en cualquier pareja. En ocasiones pensamos en añadir cambios en nuestras vidas que supongan un vuelco importante respecto a nuestra rutina diaria y no nos damos cuenta que en las pequeñas cosas es a veces donde más se valoran los cambios.
Aprenderéis a trabajar en equipo, a llegar a acuerdos, a planificar. Tendréis que compaginar gustos distintos, llegar a acuerdos para elegir un menú, planificar las compras y decidir que tareas realizara cada uno.
A su vez se trata de una actividad relajante. El hecho de tener que centrarse en la elaboración, ayuda a la mente a desconectar de las preocupaciones diarias y a dedicar todo vuestro esfuerzo en una tarea relajada. Tomar un vino mientras cocinas, escuchar una buena música y hacer de la cocina una actividad espontanea y divertida os hará olvidaros todo lo negativo.
Puede incluso llegar a convertirse en un interés común. Algo que compartir entre vosotros y con los demás. Incluso para los más osados e innovadores, existen en muchas ciudades empresas dedicadas a impartir cursos prácticos de cocina en pareja, donde a demás de aprender deliciosas recetas conocerás a personas con las mismas aficiones que tú en un entorno divertido y novedoso.
Así que no lo dudes, decidid un día especial, escoged una receta original, id a comprar juntos y una vez en casa, dejaros llevar y,sobre todo, divertíos. No se trata de conseguir una estrella Michelin, sino de disfrutar de la experiencia juntos. Preparad una mesa de acuerdo a la ocasión, saboread juntos el trabajo y disfrutad después de la cena de una manera especial.
Divertido, ¿no te parece? ¡¡Ponte ON!!